Mi experiencia con la reflexología, por Verónica Bernal Marcos

Balneario de Archena

Hay un refrán que dice así: “Siempre que vale la pena hacer algo vale la pena hacerlo bien”. Por eso cuando Anabel (la encargada del Centro de Estética Termal del Balneario de Archena) decidió que mis compañeras y yo debíamos estudiar Reflexología podal, eligió hacerlo bien.

Hace poco tiempo hemos terminado nuestras clases, pero ese es precisamente el principio de un largo camino que nos va a enseñar mucho. Como toda terapia que trabaja el cuerpo, cada sesión es distinta, pero además los pies nos hablan no sólo del estado físico de la persona que tenemos en nuestra camilla. Si escuchamos atentamente podremos descubrir muchas más cosas de las que nuestro paciente nos cuenta con palabras. Ahora miramos los pies de nuestros clientes con otros ojos; aunque hayan venido a hacerse un masaje de otro tipo. Toñi (Mª Antonia Crevillén, nuestra profesora), nos ha enseñado a “escuchar” con las manos a los habitualmente olvidados pies. Y la verdad es que es realmente curioso como los pies pueden reflejar tantas cosas y puedan ayudarnos tanto.


Hace poco tuve una clienta que se hacía reflexología por primera vez, y sorprendida por la relación que tenían sus puntos dolorosos con sus problemas de salud me dijo: ¡Parece cosa de brujas! Luego pensé en la responsabilidad que tenemos en el Centro de Estética, y cualquier reflexoterapeuta en general. Hay un montón de gente por ahí que no sabe muy bien de qué va esto de la reflexología. Hay gente que de verdad cree que es “cosa de brujas” y dice que eso son tonterías, que con tocar los pies no se soluciona nada. Además está también la gente que “dice” que hace reflexología aunque todo parecido con la realidad sea pura coincidencia, dando una mala imagen de esta útil terapia. 


Con todo esto quiero decir que nosotras, desde nuestro puesto de trabajo en el Balneario de Archena, hemos adquirido un gran compromiso, ya que nuestros clientes van a formarse una idea de la reflexología en función del trabajo realizado. Sentimos la responsabilidad y la obligación de difundir la reflexología seria y de darle la buena imagen que se merece; ya que por nuestro centro pasa gente de toda España y alguna del extranjero que decide probar esta terapia por primera vez. Toñi nos contagió este deber así como su pasión por la reflexología, y es por eso que con tantas ganas hemos empezado a recorrer este camino, como dice otro refrán: despacito ... pero con buena letra. 


Verónica Bernal Marcos
Centro de Estética Termal
Balneario de Archena
Murcia