Masaje sensorial de Qigong para el autismo



Mecanismos neuronales del masaje de entrenamiento sensorial de Qigong para niños con trastorno del espectro autista: un estudio de factibilidad.
Jerger KK¹, Lundegard L², Piepmeier A¹, Faurot K¹, Ruffino A¹, Jerger MA¹, Belger A³.

¹ Programa en Medicina Integrativa, Departamento de Medicina Física y Rehabilitación, Universidad de Carolina del Norte, Chapel Hill, Carolina del Norte.
² Connecticut College, New London, Connecticut.
³ Departamento de Psiquiatría, Universidad de Carolina del Norte, Chapel Hill, Carolina del Norte.

Objetivos:
A pesar de la enorme prevalencia del trastorno del espectro autista (TEA), su impacto global todavía no se ha realizado. Millones de familias en todo el mundo necesitan tratamientos efectivos para ayudarlos a superar los desafíos cotidianos como comer, dormir, la digestión y la interacción social. El Qigong Sensory Training (QST), entrenamiento sensorial con Qigong es una intervención no verbal realizada por los padres que recientemente ha demostrado ser efectiva para reducir estos desafíos cotidianos en los niños con TEA. Este estudio probó la viabilidad de un protocolo para investigar el mecanismo neuronal de QST.

Métodos:
Durante una visita única, 20 niños, de 4 a 7 años de edad, con ASD vieron imágenes de caras emocionales antes y después de recibir QST o ver un video (controles). La variabilidad de la frecuencia cardíaca se registró a lo largo de la visita, y se calculó la potencia en la banda de alta frecuencia (0,15-0,4 Hz) para estimar el tono parasimpático en las ventanas no superpuestas de 5 s. La oximetría cerebral de la corteza prefrontal se registró durante el descanso y mientras se miraban caras emocionales.

Resultados:
La tasa de finalización del 95% y el 7,6% de datos faltantes cumplieron con las normas a priori que confirman la viabilidad del protocolo para estudios futuros. Los datos preliminares sugieren: (1) durante la intervención, el tono parasimpático aumentó más en los niños que recibieron masajes (M = 2.9, SD = 0.3) versus los controles (M = 2.5, SD = 0.5); (2) al ver las caras emocionales después de la intervención, el tono parasimpático se vio más afectado (reducido) en el grupo de masaje (p = 0.036); y (3) la respuesta de la corteza prefrontal a las caras emocionales fue mayor después del masaje en comparación con los controles. Estos resultados no alcanzaron significación estadística en este pequeño estudio potenciado para probar la viabilidad.

Discusión / Conclusión:
Este estudio demuestra la viabilidad del protocolo sólido. Si se replica en una muestra más grande, estos hallazgos proporcionarían pistas importantes sobre el mecanismo de acción neuronal que subyace a la eficacia de QST para mejorar las dificultades sensoriales, sociales y de comunicación en los niños con autismo.